Los precios del petróleo experimentaron una fuerte alza en Asia este viernes. Este movimiento siguió a la confirmación de Israel sobre ataques lanzados contra Irán.
La acción militar generó temores inmediatos sobre posibles interrupciones en el suministro de energía desde la región de Medio Oriente, reportó el medio especializado Business Insider.
Los futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI), referencia en Estados Unidos, escalaron hasta un 14% en momentos puntuales. Al finalizar el jueves, cotizaban con una subida del 9,4%, situándose en 74,45 dólares por barril.
El Brent, el crudo de referencia para Chile y a nivel internacional, registró ganancias máximas del 13%. Al cierre de la jornada del jueves, su avance era del 8.9%, ubicándose en 75,5 dólares el barril.
Warren Patterson, jefe de estrategia de materias primas de ING, analizó el impacto el viernes. “Esto ha elevado significativamente la incertidumbre geopolítica”, sostuvo Patterson, consignó el citado medio.
El experto añadió que esta situación “requiere que el mercado del petróleo descuente una prima de riesgo más alta por cualquier posible interrupción del suministro“.
Fin a la calma en precios del petróleo
El alza interrumpe un período de relativa calma en los mercados petroleros, caracterizado hasta ahora por una amplia oferta y una lenta demanda, con tendencia a la baja en lo que va del año.
Irán ocupa el cuarto lugar como mayor productor de petróleo dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). La nación persa ha emitido repetidas amenazas de cerrar el estratégico Estrecho de Ormuz. Este paso marítimo conecta el Golfo Pérsico con el Golfo de Omán y es una ruta clave para el transporte global de petróleo y gas.
Contexto Geopolítico y riesgo logístico
Cerca de un tercio del petróleo transportado por mar a nivel mundial transita por el Estrecho de Ormuz -en la costa norte se localiza Irán-, destacó Patterson en su análisis.
Qatar, actor que representa una quinta parte del comercio mundial de gas natural licuado (GNL), también depende de esta ruta para sus envíos.
Patterson enfatizó en que “desafortunadamente, no hay una ruta alternativa”. Así que con el eventual cierre de Ormuz, advirtió, “dejaría el mercado mundial de GNL extremadamente ajustado, empujando los precios del gas europeo significativamente más altos”.
Un incremento sostenido en los precios de la energía tendría repercusiones económicas más amplias. Este escenario podría impulsar la inflación y aumentar los precios en un contexto de mayor incertidumbre económica, agravada por los aranceles a las importaciones impuestos por el presidente Donald Trump.