Aunque el Gobierno proyecta beneficios en ahorro e inversión, expertos advierten que el proyecto podría generar una reducción significativa del empleo formal y agrandar el tamaño del Estado, con efectos negativos en el mercado laboral.
La reforma previsional ya se encuentra en la Comisión de Hacienda del Senado, donde se está revisando su viabilidad debido a los considerables costos para el Estado y el mercado laboral. En este marco, el Ministerio de Hacienda reconoció que este proyecto podría significar la pérdida de miles de empleos formales, lo que agravaría aún más el problema de la informalidad en el país, que ya representa a un tercio del empleo total.
El aumento de 8,5 puntos porcentuales en la cotización previsional ha generado preocupación por sus efectos en el empleo formal. Según un informe presentado en la Comisión de Hacienda por el ministro Mario Marcel, la medida podría reducir el empleo formal en un 0,7% acumulado, lo que se traduce en la pérdida de aproximadamente 100 mil puestos de trabajo.
Además de los riesgos laborales, en una columna en Diario Financiero, la economista Gabriela Clivio criticó la creciente expansión estatal, señalando que desde marzo de 2022 se han contratado 100 mil nuevos empleados públicos. “¿De verdad queremos seguir aumentando el tamaño del Estado?”, cuestionó, aludiendo a la falta de transparencia en el registro de funcionarios y al riesgo de que la reforma incremente aún más el gasto fiscal.
El informe de Hacienda también plantea un costo fiscal elevado, que alcanzaría los USD 5.000 millones hacia 2050, equivalente al 1,7% del PIB actual, principalmente por el aumento de la Pensión Garantizada Universal (PGU) y los aportes al Fondo Autónomo de Protección Previsional (FAPP). Aunque Marcel aseguró que “el financiamiento está asegurado, incluso bajo escenarios de estrés”, críticas apuntan a que estas estimaciones podrían no reflejar los costos reales.
Por otro lado, el propio Consejo Fiscal Autónomo ha advertido sobre inconsistencias en las proyecciones fiscales, subrayando la opacidad en algunos ingresos estimados. Clivio recordó que Hacienda ha fallado en sus estimaciones anteriores, como en la repatriación de capitales, donde se esperaba recaudar USD 659 millones y apenas se alcanzó el 6% de esa cifra.
La reforma también introduce un nuevo sistema de reparto y cuentas nocionales que, según Clivio, representa “la búsqueda de reemplazar a los privados en la seguridad social” y podría desincentivar la formalidad laboral. Este esquema, sumado a la pérdida de empleos proyectada, pone en duda la capacidad del mercado laboral chileno para absorber las nuevas cargas.